Tango y candombe, música uruguaya Patrimonio de la Humanidad
En el año 2010, la UNESCO destacó al tango y al candombe como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad, con el beneplácito de las ciudades de Montevideo y Buenos Aires. Se hacía así justicia a dos manifestaciones musicales originadas en Río de la Plata, a ambas orillas, y que han llegado a ser conocidas mundialmente, siendo uno de los símbolos más visibles de Argentina y Uruguay.
Ambos géneros musicales, tango y candombe, tienen su origen en el continente africano, como la mayor parte de la música popular contemporánea. Allí surgieron, pero se desarrollaron en Uruguay y Argentina, por los esclavos negros que trabajaban las tierras de aquellos lugares. Son una perfecta metáfora de la fusión de culturas que se ha dado en estos territorios a lo largo de los dos últimos siglos, y de como la inmigración ha aportado también su granito de arena a esta música “arrabalera” hasta convertirla en santo y seña de estos dos países.
El tango ha sido mil veces relacionado con el Río de la Plata, y aunque muchos piensan que su origen es exclusivamente argentino, su desarrollo en territorio uruguayo, sobre todo en Montevideo, también fue muy decisivo para convertirse en lo que muchos llaman “el blues de Sudamerica”. En cuanto al candombe, ha permanecido mucho más apegado a sus raíces africanas, no ha sufrido tantos cambios en este tiempo, y en algunos sitios incluso sigue teniendo un matiz espiritualista o religioso. Su origen se remonta a los esclavos que llegaban desde África al puerto de Montevideo a finales del siglo XVIII, antes incluso de que Uruguay fuese un país como tal.
Actualmente, tanto el candombe como el tango presumen de buena salud en Uruguay, donde han sabido mimetizarse con las nuevas músicas que vienen de fuera, haciéndose aún más populares, como se demuestra en los festivales que se celebran en Febrero en algunos barrios de Montevideo, donde las murgas y los combos candomberos inundan las calles con su música pegadiza.